Tenía dudas sobre que tipo de coche he de comprar, pero ya lo he resuelto: será eléctrico
Movilidad
Por Luis Domenech
A lo largo de mi vida, los coches me han durado muchos años porque los cuido, por lo cual solo me planteaba el cambiarlo por uno nuevo a partir de los 15 años de vida del vehículo. Si tuviera que hacerlo ahora, sería el último vehículo que me compraría a mis 75 años, y me tendría que durar hasta 2040. Pero, vivimos en un momento de transición en el que los vehículos con motores de combustión parece ser que tienden a desaparecer siendo sustituidos por vehículos eléctricos, mientras que en España la dotación de puntos de recarga de estos automóviles no es suficiente, y hay muchas zonas en que las electrolineras son escasas y distantes de ciertos lugares, lo que nos produce el temor de quedarnos tirados por el agotamiento de la batería en cualquier lugar de nuestra ruta.
Pero el mapa del re-abastecimiento está cambiando a marchas forzadas. Los puntos de recarga eléctrica están aumentando, y las gasolineras también, algo que me resulta incomprensible, cuando los coches de combustibles fósiles tienden a desaparecer, mientras que el parque de eléctricos aumenta.
Pero según nos cuenta Enrique Dans en su Blog, "en los países donde los eléctricos ya son mayoría, empieza a ocurrir
algo curioso: quienes de verdad empiezan a sentir ansiedad por la
autonomía son los conductores de coches de gasolina, al ver cómo
desaparecen cada vez más gasolineras de su entorno", como está pasando en algunos países como en Australia, Holanda, Países Nórdicos o China.
El Europa, en un análisis de Sam Evans de un informe de ING Bank, este anticipa el cierre de miles de estaciones de servicio en la Unión Europea conforme los vehículos eléctricos van sustituyendo a los de motor de combustión. En Holanda, por ejemplo, el informe sugiere que hasta el 50 % de las gasolineras del país podrían cerrar en los próximos cinco a diez años. En Noruega, la situación es aún peor, con una mayor tasa de cierres prevista debido a su liderazgo en la
adopción de vehículos eléctricos (cerca del 90%). Esta tendencia no se limita a estos
países, sino que es evidente en toda Europa y se extiende a China.
Las mas perjudicados por este cambio serán las gasolineras pequeñas e independientes. Estos negocios, a menudo familiares, que se enfrentan a una enorme presión por parte de las grandes compañías petroleras que pueden permitirse operar con pérdidas, y son los que primero se verán abocados al cierre. Así está ocurriendo en los países citados, y es debido al fuerte incremento de la cuota de vehículos eléctricos.
En Holanda existen actualmente 4.131 estaciones de servicio, pero el estudio de ING Bank predice que solo 2.000 permanecerán operativas dentro de una década, y deberán de cerrar porque no serán capaces de generar los suficientes ingresos para mantener sus operaciones. En Suecia, los vehículos eléctricos tienen el doble de cuota de mercado que en los Países Bajos, y en Noruega, la cifra es aún mayor, y está provocando un declive rápido y, en muchos casos, inesperado, en las gasolineras tradicionales.
Esta ola de cierres, dice Dans, se describe como una "deforestación" de gasolineras, y sucederá especialmente en las regiones fronterizas donde la transición a los vehículos eléctricos se está acelerando.
¿Y que papel juega el conductor/consumidor en esta transición?
En los países pioneros, los compradores optan por los vehículos eléctricos no solo por el ahorro, sino también por sus beneficios medioambientales. La reducción de la contaminación atmosférica y las emisiones de gases de efecto invernadero es una ventaja significativa e importante en estos países. Muchos propietarios de vehículos eléctricos también están instalando paneles solares en sus casas y negocios, lo que reduce aún más su dependencia de los combustibles fósiles e impulsa la disminución del uso de las gasolineras. Este cambio en el tipo de vehículo se verá favorecido a medida que los precios de estos bajen, mas aún teniendo en cuenta que el coste de mantenimiento de los eléctricos es mas económico, y el valor añadido de las políticas públicas para subvencionar esta compra.
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| Gráfico de Gonzalo García-Espona García * |
Y si bien es cierto que este cambio está produciendo otro en el mercado del trabajo, ello no es el fin del mundo. Ya pasó con el tabaco y los estancos, o con las operadoras de centralitas de teléfono cuando llegaron los teléfonos móviles. Ya estamos viendo como los negocios están instalando cargadores en sus aparcamientos, los centros comerciales, los hoteles, los restaurantes de carretera, los parques de atracciones, y muchos otros.
El camino parece claro, y sigo sin entender la razón de la proliferación de las gasolineras Low Cost en toda España. Parece que esta apertura de negocios va contra corriente y no tiene sentido, cuando la movilidad tiende a depender cada vez mas del suministro eléctrico que no del de combustible, y crece la movilidad compartida que también se electrifica. La conducción autónoma, aún en su inicio, contribuirá a su crecimiento, y este transito hacia la electrificación, estará maduro en 2040.
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| Gráfico de Gonzalo García-Espona García * |
Según Gonzalo García-Espona *, el mercado de VE está entrando en una fase de maduración si se tiene en cuenta que ha pasado de 2018 a 2023 de una cuota del 2 % al 18 % (Agencia Internacional de la Energía [IEA], 2024). Actualmente (y desde 2021), China ostenta el título del mayor mercado de VE tanto en términos de producción como de consumo. Aproximadamente el 60 % de todos los VE
registrados mundialmente se fabricaron en este mercado. Además, también se ha convertido en el gran exportador de VE a nivel global. Solo en 2023, exportó cerca de 1,2 millones de VE, un 80 % más con respecto al año anterior.
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| Grafico de Gonzalo García-Espona García * |
Mientras tanto Europa, continúa diciendo García-Espona, se encuentra algo rezagada en esta materia. Aunque cerca del 21,5 % de los coches vendidos en el viejo continente son VE, en 2023 todavía representaban tan solo el 1,5 % de todos los coches que circulan por las carreteras (Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles [ACEA], 2024a).
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| Gráfico de Gonzalo García-Espona García * |
Pero las empresas del sector del automóvil miran hacia el futuro, ya que el cambio parece inevitable, por lo que se plantean un giro en sus estrategias y planes. Se observa que la mayoría de fabricantes ya tienen objetivos ambiciosos respecto a la fabricación y venta de VE para esta década y casi la totalidad han optado por fijar objetivos de ventas 100 % BEV para la década de 2030 (MacIntosh et al., 2023). Asimismo, las nuevas marcas también se suman a esta tendencia y el 85 % de las mismas ya venden VE y 7 de cada 10 son BEV (El número de marcas en el mercado español crece un 20 % en cinco años, 2022). Adicionalmente, al menos 11 economías tienen objetivos del100 % de ventas de vehículos eléctricos antes de 2030 y otras 6 economías, junto con la Unión Europea, tienen metas similares para 2035 (IEA, 2023).
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| Gráfico de Gonzalo García-Espona García * |
En resumen, creo que con esta reflexión, ya he resuelto el dilema de que coche me debo de comprar hoy: deberá de ser eléctrico, y mejor aún si tiene una batería de sodio‑ion, que pronto se convertirán en la opción más barata y sostenible para coches compactos y urbanos, aunque aún están entrando en el mercado.
Puesto que el vehículo eléctrico es, en definitiva, una necesidad medioambiental, una demanda impuesta y una oferta inquieta ante los cambios que se avecinan por esta transición, y su futuro es aún en algunos aspectos desconocido, este es seguro y en el, los diferentes actores del sector ya perciben como inevitable la necesidad de actuar y tomar decisiones, los consumidores también.
* Gonzalo García-Espona García es Jefe de sección en la SG de Estudios y Evaluaciones de Instrumentos de Política ComercialMinisterio de Industria, Comercio y Turismo.
Referencia:
LA TRANSICIÓN AL VEHÍCULO ELÉCTRICO. Evolución y problemas. Gonzalo García-Espona García









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